El Rincón de Figaro

Cómo almacenar correctamente las croquetas de tu perro

by Judith Castro

Las croquetas son el alimento más común para los perros y a pesar de que parecen muy resistentes y que nunca caducan, son comida y debemos tener cuidado con su manejo y con la manera en la que las guardamos para mantenerlas frescas, limpias y crujientes.

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- No le des a tu perro croquetas viejas. Si hay una bolsa abierta desde hace más de 6 semanas, esta comida ya no está fresca. A pesar de que es comida deshidratada, también guardan humedad y si se dejan mucho tiempo abiertas, pueden crecer bacterias u hongos que le hacen daño a tu perro.

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- No subestimes la nariz y la inteligencia de tu perro. No le dejes las croquetas a su alcance porque él encontrará la manera de llegar a ellas.

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- Para evitar que se hagan feas o que la bolsa se rompa o que tu perro la asalte, lo ideal es ponerlas en un recipiente de plástico hermético. En PetNGo puedes conseguir algunas opciones muy buenas. Coloca la bolsa dentro del recipiente y no olvides lavarlo cada vez que lo cambies para que las moronitas que se puedan quedar abajo no se pudran y contaminen lo demás.

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- Otra razón para guardar la bolsa es para tener el lote y la fecha de caducidad. El lote te servirá en caso de que el fabricante pida una recolección de croquetas por un problema o en caso de que algo le caiga mal a tu perro y quieras reclamar.

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- No pongas croquetas viejas junto con las nuevas.

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- Cuando sirvas las croquetas, antes de cerrar la bolsa intenta sacarle el aire y doblarla para que se conserven mejor, así como haces con el cereal. Igual le puedes poner un clip como estos a la bolsa para evitar que le entre el aire.

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- Usa una cuchara o taza medidora para servir. No metas la mano pues esto puede contaminar las croquetas y además la mano aún no es reconocida como unidad de medida.

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- Nunca, bajo ninguna circunstancia, regreses croquetas a la bolsa. Si tu perro no se las comió, es mejor intentar dárselas más tarde o tirarlas pero no las regreses al empaque pues pueden contaminar la comida con babas de perro o cualquier otra cosa con la que hayan tenido contacto.

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-Mantén las croquetas en un lugar seco y sin luz directa del sol. No las dejes abandonadas en el jardín o en el patio. El calor y la humedad pueden hacer que se echen a perder más rápido.

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