¿Alguna vez te has preguntado que sentirá tu perro cuando tu, algún amigo, un desconocido u otro perro se acerca demasiado a él? ¿Te has puesto a observar sus reacciones? Los perros, al igual que nosotros, tienen un espacio crítico personal y pocas veces le damos la importancia necesaria al respeto de ese espacio.
La proxémica se refiere al estudio de la relación que existe entre la persona y el espacio, el espacio personal; es decir, él que nos rodea delante, atrás y del lado. La distancia con la que nos sentimos cómodos varia según la persona con la que estamos y puede ser una distancia intima, personal, social o pública.
¿Cómo te sentirías si estas en un elevador, entra una persona y se coloca muy cerca de ti, habiendo más espacio en el elevador? Lo mismo sucede con los perros, ellos tienen su espacio personal y se sienten incómodos; si algún desconocido se acerca demasiado, harán lo posible por alejarse y tratar de mantener una distancia segura.
También habrá personas con las que se sienten más confiados y otras con las que les cueste mas trabajo establecer una proximidad. Si ves que tu perro se aleja de un persona en particular, tratar de mantener su distancia, no lo obligues a acercarse demasiado, respétalo e intenta indagar que es lo que le incómoda a tu perro: puede ser el timbre de su voz, su aspecto físico, su olor o la forma de aproximación.
Si tu perro es desconfiado o no ha tenido mucha interacción con más personas, puedes realizar algunos ejercicios mientras algunos amigos o familiares se encuentran a una distancia razonable de él. Los juguetes interactivos son una excelente opción, lo mantendrán muy ocupado, le ayudarán a enfocarse en otra cosa mientras se habitúa a la presencia de más personas. Recuerda que con paciencia, dedicación y constancia podemos lograr grandes cosas en nuestros peludos.
