Si tu hijo está teniendo problemas en la escuela, en vez de pensar en un tutor o en quedarte horas en la tarde estudiando con él, tal vez todo lo que necesita es un perro a su lado.
De acuerdo con un estudio realizado por la psicóloga Andrea Beetz de la Universidad de Rostock en Alemania, los niños que tienen problemas de aprendizaje o patrones desorganizados de estudio, pueden verse altamente beneficiados por la compañía de un perro.
Según este estudio, el 90% de los niños con necesidades especiales de educación y el 40% de los niños que atienden a escuelas normales tienen problemas para regular situaciones de estrés. El estudio buscaba demostrar que los niños inseguros o menos sociables podrían beneficiarse de la compañía de un perro más que de la de un humano cuando tienen que lidiar con una tarea que les genera estrés, como un examen de matemáticas.
Se investigó a un grupo de 47 niños (hombres) de entre 7 y 11 años que eran inseguros y poco sociables. Los dividieron en tres grupos:
- El primer grupo de 24 niños estaría acompañado por un perro de terapia.
- El segundo grupo de 10 niños estaría acompañado por un adulto amigable.
- El tercer grupo, el de control, de 13 niños estaría acompañado por un perro de juguete.
Lo que los niños tenían que hacer era hablar en público enfrente de un grupo de adultos desconocidos y después presentar un examen de matemáticas.
A todo los niños se les midió vía salival el nivel de cortisol, la hormona que se libera cuando estás estresado, 5 veces durante el estudio, desde antes de iniciar, tres veces durante y una al final.
Los resultados del estudio son impresionantes. La respuesta al estrés fue significativamente menor en los niños que estaban acompañados por el perro. Es más, los niveles de cortisol estaban inversamente relacionados con la cantidad de contacto físico entre el niño y el perro. Es decir, los niños que acariciaban al perro o le rascaban la panza durante su presentación en público y durante el examen, disminuyeron los niveles de cortisol.
Por otro lado, los niños que estaban acompañados de un adulto presentaron los niveles de cortisol más altos, tal vez porque el adulto los ponía nerviosos.
De aquí que el estudio concluya que aquellos niños que tienen dificultades para socializar o son inseguros, se pueden ver altamente beneficiados de la compañía de un perro, más que de la compañía de un humano muy amigable.
La idea de este estudio era apoyar la educación asistida por animales que es una creciente tendencia en Europa, donde cada vez son más los maestros que llevan a sus perros con ellos a la escuela para motivar y relajar a los alumnos pues saben que un alumno estresado seguramente aprenderá menos y sufrirá más.
Si bien tal vez aún falta tiempo para que esto se vuelva popular a nivel mundial, siempre puedes empezar con un perro en casa que acompañe a tu hijo a estudiar con él y ver si en la escuela están abiertos a dejar que lo acompañe en exámenes muy difíciles.
[Fuentes: Yuhas, Danis "Pets, Why do we have them?" Scientific American. Mayo/Junio 2015, pag.32, Print., Effects of Social Support by a Dog on Stress Modulation in Male Children with Insecure Attachment - ResearchGate ]
[Foto: 98954801 by Anna Hoychuk/ Shutterstock]
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